La luz roja y la luz infrarroja son dos tipos de radiación electromagnética que forman parte del espectro de luz visible e invisible, respectivamente.
La luz roja es un tipo de luz visible con una longitud de onda más larga y una frecuencia más baja en comparación con otros colores del espectro de luz visible. A menudo se utiliza en iluminación y como dispositivo de señalización, como en los semáforos. En medicina, la terapia con luz roja se utiliza para tratar diversas afecciones, como problemas de la piel, dolor en las articulaciones y dolor muscular.
La luz infrarroja, por otro lado, tiene una longitud de onda más larga y una frecuencia más alta que la luz roja y no es visible para el ojo humano. Se utiliza en una variedad de aplicaciones, como en controles remotos, cámaras termográficas y como fuente de calor en procesos industriales. En medicina, la terapia con luz infrarroja se utiliza para aliviar el dolor y mejorar la circulación.
Tanto la luz roja como la luz infrarroja tienen propiedades únicas que las hacen útiles en diversos campos, desde la iluminación y la señalización hasta la medicina y la tecnología.