Ahora que puede calcular qué dosis está recibiendo, necesita saber qué dosis es realmente efectiva. La mayoría de los artículos de revisión y el material educativo tienden a afirmar que una dosis en el rango de 0,1 J/cm² a 6 J/cm² es óptima para las células, menos sin hacer nada y mucho más anulando los beneficios.
Sin embargo, algunos estudios encuentran resultados positivos en rangos mucho más altos, como 20J/cm², 70J/cm² e incluso tan altos como 700J/cm². Es posible que se observe un efecto sistémico más profundo con dosis más altas, dependiendo de cuánta energía se aplique en total al cuerpo. También podría ser que la dosis más alta sea efectiva porque la luz penetra más profundamente. Obtener una dosis de 1J/cm² en la capa superior de la piel sólo llevará unos segundos. Obtener una dosis de 1J/cm² en el tejido muscular profundo podría llevar 1000 veces más tiempo, requiriendo 1000J/cm²+ en la piel de arriba.
La distancia de la fuente de luz es de vital importancia aquí, ya que determina la densidad de potencia de la luz que llega a la piel. Por ejemplo, usar el dispositivo de luz roja a 25 cm en lugar de 10 cm aumentaría el tiempo de aplicación requerido pero cubriría un área más grande de piel. No hay nada de malo en usarlo desde más lejos, sólo asegúrate de compensar aumentando el tiempo de aplicación.
Calcular cuanto dura una sesión
Ahora debes conocer la densidad de potencia de tu luz (que varía según la distancia) y la dosis que deseas. Utilice la siguiente fórmula para calcular cuántos segundos necesita para aplicar la luz:
Tiempo = Dosis ÷ (Densidad de potencia x 0,001)
Tiempo en segundos, dosis en J/cm² y densidad de potencia en mW/cm²